En dónde estás, dónde te fuiste
dime por qué me abandonaste,
que con tu silencio mataste
aquella ilusión que me diste.
Ya muchos días de tu ausencia
es que me han parecido un siglo,
mas calmar mi penar consigo
recordando estoy, tu presencia.
Amarnos de noche o de día
con pasión, ternura o con celo,
o juntos mirando hacia el cielo
vibrando en total armonía.
Vibraciones de fuego ardiente
mi vida sin ti es un desierto,
mortal herida cruel lamento
un atroz martirio en mi mente.
Pero al verte el día renace
y se revisten mis recuerdos
solo falta que nos amemos.
Anda, ven que se hace muy tarde.
AprendoAExtrañarte.
©Violeta