Lourdes Aguilar

DUDAS

¿No hay lágrima ni rezo? 

Rezo en busca del cielo nuevo 

Ni una lágrima por el niño muerto 

Niño sin sueños y en lo externo absorto 

Con el egoísmo propio del engreído adulto 

 

¿No hay un canto’?

Un canto que sea del pueblo  

Un canto expresando admiración y alegría 

Su admiración y alegría intensa hacia las cosas simples 

Simples como el sol y la luna 

Simples como la tierra húmeda y la roca muda 

Con voz tan fresca como agua de lluvia 

Lluvia del corazón que ama la vida 

Ama las plantas y con los animales habla 

 

¿No hay gozo en el humilde esfuerzo

En disfrutar después de activo el músculo quieto? 

¿No hay veneración para el camino largo?

¿No hay esperanza sembrada al cubrir la tumba 

De quien expresó su anhelo y extendió sus alas? 

¿De quien el tiempo no apagó su llama 

Esperando sin miedo exhibir sus canas

Y su rostro marcarse con profundos surcos? 

 

¿No hay cese a ese dolor de depender de algo

Algo tan fugaz y banal que no nos llena?

El placebo con el que permanecemos insensibles 

Insensibles a la crueldad que nos condena 

Crueldad que asumirla como nuestra 

Sería tan potente que nos acaba