Simon Lorenzo

El soldado

corre la sangre por mi cuerpo maltrecho ¡arde mi pecho por las balas! el simple hecho de mover un dedo ya es suficiente para recibir un dolor inmenso incomparable como si 100 cuchillos me apuñalaran la espalda una y otra vez sin ningún cese ni freno que pueda mermar mi dolor. pero aún así aunque el dolor físico sea agobiante no lloro por eso no lloro por el dolor o por tener los huesos rotos lloro y sufro por tu ausencia en mi piel ¡lloro porque extraño tus besos! lloro porque extraño tu simple voz diciéndome que todo va a estar bien...