Adelaine Soto Alvarez

TIERRA SECA

 
No amanece
Y el dolor comienza
Con su aspereza
A inundar
Este pedazo de tierra
Donde no tenemos
Ni el más leve alivio
 
Colgada al noticiero
Me aferro al infortunio de mi gente
Mi centro late aletargado
Pero aun late
A pesar de que todo
Continue ausente
Y sin límites 
 
La luz se desvanece
Hasta el sol
Regatea sus rayos
 
Pobre de los ermitaños
Del disparate
De los niños a oscuras
Los ancianos sin pan
Las mujeres de ocho manos
El mendigo
Disperso
Y la inflación
Haciendo malabares
En el aliento
De una isla perdida
 
Los enfermos…
Para qué hablar de ellos
Si tan sólo pueden alcanzar
Las inclemencias
Que proyectan los de arriba
Más bien los de abajo
Porque son espectros ocultos
Cortándoles la lengua
A quien forme el griterío
 
Todos sin luz propia
Viviendo la maldad
Y los garroteros colgados
A la avaricia
Que explota
Las esferas
 
Aun no amanece
Y todos están lánguidos
Cubiertos del sudor dañino
En espera del pregón
Que se dispersa
Por los quebrados bolsillos
Donde habitan
Los sueños truncos
 
La tierra permanece
En un tenebroso silencio
El cántico no llega
Y las plantas se irritan
Negándoles sus frutos
 
Miran sin ver
Ven sin mirar
Con los ojos desconocidos
Y la mueca cada vez más honda
 
No amanece
Y el dolor comienza
Con su aspereza
A inundar
Este pedazo de tierra seca
Maldecida y profana