Cuando siento angustia recuerdo tu compañía, lágrimas internas cantan en tu ausencia, verás, una vida cambió al cruzarse con la tuya.
Hoy esa vida vaga sin presencia, extraña y añora verdadera compañía, ahora la soledad es solo la señal, señal de buscar o tan solo anhelar.
Cuando siento angustia quiero alejarme y dejar de avanzar, cuando siento angustia quiero huir, quiero perder el rastro, simplemente dejar de sentir.
Cuando pierdo la cordura, cuando la vida se hace fría, cuando el calor de una compañía es solo la neblina de un nuevo día.
Cuando no encuentro diferencia entre el pulso y el temblor de los latidos del corazón, cuando la palabra lejanía ocupa el lugar de tu compañía.
Cuando la soledad te extraña y es la única compañía que te espera al final del día, la que te cuida con sus manos frías, todo hasta volver a chocar con otra vida.