Edmundo Onofre

PIES DESCALZOS

Quiero que me saques los zapatos

para así de verdad caminar

por todos los relieves terrestres

que comienzan a orillas del mar.

Sentir la sensación de la arena

cuando la aplana el viento en el mar,

sentir la tibieza de sus granos

cuando el sol los comienza a dorar.

Grato percibiré los guijarros

que voy a encontrar al andar,

sentir el cosquilleo festivo

bajo mis dos plantas al pisar.

Dormiré en las noches caminando

y así, caminando descansar

para no perder el tiempo escaso

que la vida me va a regalar.

Amasaré el barro humedecido

que enloda la senda al lloviznar,

mis fríos pies marcarán sus huellas

que el calor del sol no va a borrar.

Mis pies después de tantas andanzas

se suavizarán al empolvar

sus asperezas con suave tierra

que en tiempo estival van a tocar.

 

De azul también se pondrán los dos

cuando pisen la escarcha polar,

la nieve de las grandes montañas

y el suelo cristal al granizar.

Pisarán el tapizado césped

que las praderas han de verdear

y aquellas olorosas hierbas

les perfumarán siempre al pasar.

Irán muy cómodos por la landa

ya que el río los va a refrescar;

también se esforzarán en laderas

porque se cansarán al trepar.

Quítame pronto mis dos zapatos,

deseo yo descalzo caminar

porque mis desesperados pies

el suelo urgente quieren palpar...