Te fuiste una mañana de mi lado,
alejándote sin despedirte y sin decir nada,
son recuerdos los que me han quedado,
pues creí que tú vivías de mí enamorada.
Los recuerdos de ayer están todos tirados,
cual hojas secas hoy se los lleva el viento,
recuerdo las tardes y momentos esperados,
mirando la lluvia creyendo en tu sentimiento.
Hoy las calles están muy solitarias,
pero un amigo me preguntó por ti,
le dije que partiste dejándome penurias,
y hoy pasaré otra noche solo y sin ti.
Pero qué puedo hacer si estaba destinado,
que en cualquier momento tenías que partir,
camino por la plaza pero ya no ilusionado,
levantando recuerdos que me hacen sufrir.
Quizás no comprendiste mi noble sentimiento,
quizás fueron motivos que no tenía solución,
aunque estas lejos, estas en mi pensamiento,
pues vives en mi mente y dentro de mi corazón.