Ed-win

Bello, bello, cometa.

El final se acerca;
ahí viene la serpiente,
cabalgando una
estrella de fuego.
Con su larga cola 
dirigiéndose hacia mí.
Mientras sigo aquí
a la espera con angustia.
Sin saber si esta serpiente
caerá en mi cama 
de agua que la relaje.
Pero si cae sobre
 mi frágil corazón,
 causaría  caos.
Después de esto,
 nada sería igual.
¿No sé qué pensar?
¿Qué va a pasar?
Ella me confunde
con esos diamantes
cubiertos de miel  y
una sonrisa que 
ocultan dos espadas.
Pero sigue siendo
 una linda serpiente,
cabalgando una estrella 
de fuego mortal.