Nik Corvus Corone Cornix

El Dejado Atrás

Se tienta y mira hacia abajo,
hacia la oscuridad, y es tan tentadora,
que se lanza al aire, se suelta del risco,
y da un chapuzón en la brea.

Ninguna de las criaturas de desazón lo atrapa,
sólo huyen despavoridas,
las cucarachas del calor,
huyen del aura negra
como el odio de diez mil soldados...

No cae hacia abajo,
sino que busca la parte honda con fuerza,
se regocija en la tristeza.

Llega al fondo de todo,
donde nunca había estado,
donde tanto miedo tenía de llegar,
se observa completo, sin dudas,
enteramente
negro...

Mientras los juegos de artificio suenan,
queriendo formar danzas
con los truenos de su corazón.

Pero solo son un leve espejo.

Nada en maldad,
quiza no se sienta feliz,
ni orgulloso,
pero si infinitamente
enojado.

Aún asi,
cuida a los demás
de sí mismo.

Príncipe en tinieblas,
hacedor de tristezas,
el dejado atrás, el mancillado,
toca sus trofeos y se hace uno
con ellos...