polonius

Pena por verte mi condena

Vendería mi alma al Diablo

si con eso supiera que por un día

pudiera tus carnes sentir en labio

mordiendo tu cuello, sintiendo la vía

que nutre de vida al tierno infante

que pedía los sabores que solo tu

ofrecías y que ahora intento

soñar que puedo alcanzar con acritud.

 

Frente a un puesto de rosas me veo contento

comprando las más rojas e intento

imaginar tu felicidad al verlas

frente a ti iluminando tu belleza,

esa que ha conquistado mi novela

de no ficción que cuento con entereza

a quien quiera leerla frente al monitor

de su ordenador pues ese único requisito

necesita para sentir al morador

que desespera por no sentirte a su vera.

 

Siempre que dejo volar mi imaginación

me veo contigo desnudos y abrazados,

en mil besos fusionados de pasión

y amor revolucionado en sentir acalorados

mis sutiles dedos dibujando formas

en tus pechos mientras me miras

a los ojos y con voz dulce declamas

penetración por sentirme sin deriva

dentro de ti por siempre jamás.

 

Es mi desesperanza desespero por deseo

de ti que no veo más allá de puro

trasiego que deforma mis días de recreo

por no verte ni olerte, más es oscuro

devenir el que siento sin ti y no puedo

más que pedir amarte y honrarte

por haberte adueñado de todo mi cuerpo,

por saberte dueña de todo mi arte,

por ser señora que declamas mis escritos,

escribo por ti, alma mía, son mis gritos

de amor dolor y pena por verte mi condena.