No quise agobiar con velas a ningún santo,
No quise preocupar a ningún amigo,
No quise tapar el sol con un dedo,
No quise llamar ninguna atención,
No quise gritar en el oído de nadie,
No quise obligar a nadie a leer mi mente,
No quise iniciar ninguna discusión,
No quise que nadie cambiara de opinión,
No quise dudar de la gente tanto,
No quise analizarlo todo,
No quise castigarme por fallos de ayer,
No quise preocuparme por el futuro,
No quise vivir en el pasado,
No quise encerrarme en mi madriguera,
No quise perder mi identidad,
No quise perder mi felicidad,
No quise dejar de ser yo...
Quise respirar bien profundo
y volver a ver la belleza en las flores,
en los atardeceres, en los amaneceres,
en los ojos de quienes amo,
en la sonrisa de los niños,
en las nubes, en el agua,
en el aire, en el fuego,
en todo lo que me rodea.
Quise abrir un día los ojos
y dejar de ser ciego a toda la belleza,
lo que me alegraba, lo que anhelaba,
todo por lo que tenía antojos.
Quise volver a ser feliz,
a sonreír, a bailar, a reír,
a cantar, a vivir,
a ser yo mismo.
Lo quise siempre, pero todo es oscuro,
intimidante, frio; y solo espero
salir de este pozo pronto
y ver la luz de nuevo.