Cuando regreses,
renacerá la luz
y volverá a brillar la primavera;
y entonarán los pájaros
su dulce trinar en las mañanas
como solían hacerlo
antes que partieras.
Cuando regreses,
la vida tomará otro rumbo.
Las flores mostrarán de nuevo
su arco iris de colores,
y cantará el amor
su oda a la alegría.
Y será entonces cuando mi corazón palpite
con la misma intensidad que antes lo hacía.
Cuando regreses,
mostrará el nocturno cielo
su inmensa posesión de estrellas,
y brillarán con ellas
las pupilas de tus ojos pardos,
mis apagadas manos taciturnas
y la sonrisa de este humilde bardo.
Cuando regreses,
no habrá penumbras
ni dolor de ausencia.
Y serán los gritos
de este amor callado
los que despierten a este mundo triste;
porque esta vida, amor, sin tu presencia
ya no es la misma desde que te fuiste.
Cuando regreses, mi amor, cuando regreses.