Raul Gonzaga

El deseo de aquel beso

Cuando los ojos se miran
y las manos se entrelazan,
y nuestras almas abrasan
tibios pechos que suspiran;

nuestros sueños deliran
y los deseos se escapan,
cuando pasiones desatan
aromas que nos inspiran;

nuestros labios se estremecen,
se atraen con locura,
se reúnen y se mecen

en apasionada aventura;
amantes que se adormecen
por un beso, hecho ternura...