Me extasío en cada minuto en que te estoy mirando,
gozo uno a uno tus besos salpicados de “te amos”;
es una delicia rozar las suaves orillas de tus formas;
eres como un coloso, de paz y gracia, vas arropado.
Increíble es dejar de ser yo para ser tus momentos,
plétora de amor somos, cuando nos amamos;
convertidos en arpegios sonoros y asonantes…
es indescriptible volvernos uno… tocando el infinito
Aunque no haya camino, el camino lo encuentro
cuando te veo, voy a tu lado y te robas mi aliento;
aunque sea trillado, nunca es lo mismo el tenerte;
nos reescribimos y descubrirnos sin aspavientos.
Marismas cubren el paisaje volviéndolo inaccesible,
y, sin embargo; los pies se aligeran al ir hacia a ti,
me baña tu fragancia perfumando mi borinquen,
recostada en tu regazo, mis sueños se adormecen