¡¡Escríbeme!!
Me gusta que seas dulce y tierno, suave y cariñoso,
y que me abraces, con un beso de tus labios de fuego,
un beso que baje hasta la espalda
y me encuentres en tu lecho desnuda y a tu mereced.
Sin más palabras, abrazarnos con un beso de fuego eterno,
que te robe el corazón y el alma, seas sólo para mí.
Quiero que seas caricia de amor, pasión y deseos de los dos,
envolviéndonos, en una noche de diciembre, hasta el amanecer,
y con el frío de madrugada, quedarnos abrazados, apapachándonos
en el silencio y escuchar las campanadas de misa, de media noche,
en el confesionario, voy a decirte, todos los pecados que cometo contigo
cada vez que te sueño entre sábanas, y te diré allí mis secretos más oscuros.
Quiero soltar el llanto por tanto tiempo contenido, por no estar contigo,
por todo ese tiempo de no tenerte, solo fantaseaba contigo todas las noches.
Quiero abortar todo el dolor, que dejaste en mí, con tú ausencia aprendí,
a llorar de noche, y sin luz, a dejar bajo la almohada, los \'\'Te quiero\'\'
y dejar bajo la almohada, los \'\'te amo\'\' guardados todos para ti,
esperando el encuentro cautivador de tu mirada, desnudándome
con tus caricias el alma, sé que debí dejar de amarte, pero seguí conservando
este sueño, pensando cada día, cada minuto, y hora, qué venías a buscarme.
He perdido la lozanía de mi piel. ya tengo más años, y menos peso, por la soledad
que vivo, pero también tengo más Amor para darte, porque lo he conservado todo
el tiempo, en la ánfora del Amor, que un día te ofrecí, sigue intacto, para ti.
Sigue tan vivo, cómo la misma vida, qué un día me dieron tus abrazos, y tus
besos, sigo atada a ese recuerdo, te sigo amando...
¡¡Escríbeme!!
Yo hubiera querido, qué otro Amor, te hubiera sacado de mi vida, y perderme
sin tu recuerdo, no hallé, en otros ojos, el brillo de tus ojos, llenándome de ti,
y en él, no vi, el fuego de tus besos, ni tus abrazos, qué sanaron mi alma herida,
el abrazo tuyo, me destroza y me parte por la mitad, y te amo más cada segundo
de mi vida, estar en tus brazos, es viajar al infinito, de ida y vuelta.
Me dormí en tu piel, y desperté en tus ojos amarillos, me llené de ti, todo el tiempo.
No quiero darte, el último beso de Amor, quiero darte mil besos y robarte el aliento
porque me haces tanta falta, más que la vida misma, qué ahora estoy viviendo, sin ti.
¡¡Escríbeme, quiero saber de ti, antes que muera de soledad!!
Siempre tuya, siempre mío...
¡¡Escríbeme!!
Alicia Pérez Hernández... México
No es la pluma la que escribe, es el al
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