No se puede vivir sin desear sueños,
los que viven sin al menos, imaginarlos,
los que no buscan nunca nuevos desafíos,
son los que pueden llegar a depresivos .
Los sueños son acicates de nuevos estímulos,
salidas de los refugios oscuros cavernarios,
una salida de ciertos instintos primarios,
sin sueños somos más débiles, más ordinarios.
Yo tengo muchos, infinitos sueños,
es decir vivo muchas veces cerca del cielo,
en las nubes, y claro está, creo en los milagros,
por eso soy muchas veces anormal y estrafalario.
No sueño nunca con ser el más poderoso,
no pienso en el miedo a lo establecido,
busco continuamente senderos de escapismo,
me gustan los caminos solitarios.
Los sueños pueden ser solo objetivos,
medidos, controlados y clasificados,
un camino continuo de hábitos y de átomos,
lo importante es ser enemigo de los ostracismos.🤔