Juan Rafael Mena

LECTURAS QUE ACOMPAÑAN DESDE LEJOS

 

 

Vosotros escritores

y poetas que entonces

yo leía a menudo

por de día y de noche,

con desvelo entusiasta,

incluso con desorden,

no sabéis cuánto os amo,

y cuánto os debo.

                            Al borde

hoy de los viejos años,

os pregunto que adónde

estáis cuando os contemplo

como fuisteis: Quijotes

entre gentes que apenas

os hacían favores

de leeros.

                    Ahora

escucho vuestras voces

con gratitud. Que os llevo

como os llevaba entonces.