Ella... No es fiel a sus sentimientos, sus decisiones depende de qué tan rápido es el río, siempre en movimiento, se lastima así misma con cada palabra.
La verdad? Es tan sensible, solo desea volar.
Ella... Se agita entre la marea de pensamientos, alimenta su alma entre los rayos del sol. Cerrando las puertas de los prejuicios, encerrada en la habitación de jueces, señalada, despojada de su esencia.
La verdad? Es tan frágil, solo desea soñar.
Ella... No es más que el reflejo de la impaciencia, sin principios, sin moral... Una tormenta de emociones, huracán de pasiones, un sismo de placeres.
La verdad? Es toda una dama, toda una mujer, toda una reina, solo quiere vivir.