Me miras y desgarras mi alma, te observo y bajas la mirada
Con inocencia, sientes el despertar, y yo, aprendo a vivir en tu mundo
Ambos abrazamos al fuego; arderemos, nos quemaremos y muy probable, moriremos.
Muchos le dirán La petite Mort, la pequeña muerte,
Pues de pequeña no tiene nada
Más cabe en un momento, que me sabe a eterno.
Tu cuerpo tiembla y se estremece
Mis manos, trémulas, avanzan con miedo, tu aroma se une al mío
Y mis deseos escapan, sin temor sin pesar, a esta realidad.
Somos jóvenes aún, pero lo esperamos y lo deseamos por tanto tiempo,
Que hemos decido abrazarlo.
Veo tus pechos desnudos y tú, observas mi cuerpo excitado, te acercas con recelo
Y te tomo con desenfreno
Mi saliva se mezcla con tu sudor, y el amor arde, quema, nos derrite.
Me miras y desgarras mi alma, muerdes con frenesí y me invitas a morir
Sí, así es una pequeña muerte, así es el desvarío absurdo de la sexualidad,
No quería creer, no quería morir,
Más ahora deseo que esto perdure una vez más y por toda la eternidad.
Autor: Bernardo R Villatoro/México
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