alicia perez hernandez

Te extraño todos los días…

Te extraño todos los días…

Extraño tus labios en el beso que nunca me diste.

Extraño tu abrazo que se perdió la noche de tu adiós.

Te extraño en la espalda que tantas noches acariciabas.

Extraño tus ojos negros con mirada de lobo, atacándome,

desgarrándome la ropa para poseerme a tu antojo y placer.

Entre versos y poesías me tuviste, me tenías a tu alcance.

Yo era toda tuya y tú eras todo mío, en noches de placer.

Extraño las conversaciones que nos hacían reír.

Extraño tu cuerpo desnudo junto al mío.

Extraño todas las noches jugar contigo, contarte todo lo mío.

Decirte en secreto con medias verdades mis fantasías contigo.

Sueños eróticos poseyéndome para contártelos y reírnos.

Cómo en el qué te dije que te veía muy flaco y te toqué las costillas.   

Cómo no extrañarte, si eres mi paño de lágrimas, y mi confidente.

Te extraño de noche y te extraño de día y tengo celos pensando

Que tienes a alguien cerca de ti, en esas noches que no duermo

Juro que deseo seas, ciego, sordo, manco, y mudo para que no tengas

Otra mujer junto a ti, no soy yo, son mis celos de amor por ti.

Extraño todo de ti, lo puro y lo prosaico, lo decente y tu vulgaridad.

Lo caballero y lo patán, lo culto y lo ignorante que eres cuando no ves

El amor que te profeso. Amo amarte de este modo, así herida, así sangrando,

Así perdida y loca de amor por ti. Soy una demente desquiciada, insegura,

Amargada por no tener tú amor, muérete, y en tu tumba te revoletearas

Por no haberme dicho que me amabas, cuando en otro personaje reconociste

Que me amabas. ¿¿Cobarde, no sé si puedas vivir sin mí??

¡¡Yo sin ti no puedo vivir!!

¡¡Me dejo morir todos los días para olvidarte y no puedo!!

 Te metiste profundo y muy hondo en todo mi ser.

¿Cómo quieres que te olvide? ¡¡Si yo no sé olvidar!!

¡Te voy a extrañar toda la vida! Ya no hay inspiración, esto fue escrito con dolor.

Siempre tuya, siempre mío. ¡¡Ojos míos, de mi querer!!

¡¡ME FALTA VIDA PARA AMARTE Y TIEMPO PARA OLVIDARTE!!

Alicia Pérez Hernández... México
No es la pluma la que escribe, es el alma
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