Ramón Bonachí
Frigg enojada (Soneto alejandrino)
En vano “Frigg” maltratas mi dicha con tu ira,
que es dulce aunque me insulten tus dos ribetes rojos;
mañana, tarde y noche me premias con enojos,
mas yo, pongo claveles, donde el odio te inspira.
Me ayuda un corazón que al sentirte respira
esa bella esquivez que le ofrecen tus ojos;
se llena de ilusiones aunque sean despojos
y por venir de ti, se contenta y suspira.
No esperes que ofendidos te eludan mis amores,
o huyan desconsolados, por ser muy alto el precio;
resistirán lo amargo de todos tus rencores.
Y te quieren así, colmada de valores,
a falta de atenciones, mas vale tu desprecio,
que un sinfín de promesas o un sinfín de favores.
Fotografía y poema: Ramón Bonachí.