Hablo de ti:
y lleno mi boca de peces,
y quemo mi lengua,
y florece mi garganta.
Hablo de ti:
de tu belleza sin máscaras,
de tus ojos que lloran miel
por amargas lágrimas.
Hablo de ti:
te llevo como bandera,
eres mi patria y mi frontera
y la paz de mi alma.
Hablo de ti:
le hablo de ti a Dios
cuando estoy en guerra,
hablar de ti es hablar de amor.
—Felicio Flores.