Poesía del alma
La poesía es vivir,
dilucidar dilemas
debatir y arguir,
entre soles y lunas,
su fino fluir.
Cuando florece,
el alma se libera,
delata secretos,
en sutiles versos.
Obra del corazon,
sonoros latidos
de la pasión
en afinado ritmo, cadencia y sabor.
Es el yo interior,
su magia y conexión
con el mundo exterior,
entrelazando el ser con el ser
y el no ser,
para hilar y tejer,
la plenitud del hombre
y de la mujer,
de la naturaleza,
el desierto
y el verger.
Es la poesía
dejar atrás
los miedos
y asumir la valentía
con autoría,
cual verdad
y fantasia,
colorea el paisaje de fanfarrias
y viajes.
Con números y letras,
vuela cielos
recorre la tierra,
y le canta al universo.
Anda con fe
el destino incierto,
en valles y montañas,
nacen proyectos
y epopeyas,
desde sus entrañas,
para nacer y vencer, luchar y morir,
renacer
y por siempre existir.