Un día amanecio
 con mucha tristeza
 en mí interior.
 Ese era el día a día
 de mí triste corazón.
 Pero con firmeza esperé
 y al fin encontré…:
 lo que andaba buscando,
 lo que iba añorando…
 …era tenerte a ti.
 Porque antaño
 tristemente latía mí corazón,
 ahora contigo late de emoción.
 Juntos debemos estar
 para poder reanudar
 esa felicidad,
 que se nos prohibio,
 porque juntos,
 abrimos nuestro corazón.