EHUR OHR

Solo...

Me quedé aquí varado…

en la ribera del despecho,

con una nostalgia inconsolable,

con una tristeza que se esparce…

que lo anega todo…

que atraviesa el corazón…

hasta lo más profundo…

hasta el centro del alma…

inconteniblemente.

 

Me quedé aquí…deshecho,

con una amargura abrumada,

con un suspiro atado a la apatía,

con mis latidos atorados en el pecho…

intentando escapar de esta ansiedad,

queriendo huir de la desesperanza.

 

Me quedé petrificado…

habitando en el limbo de tu adiós,

extraviando en la tierra del olvido…

en la ojerosa secuela del insomnio,

regando con lágrimas…tu jardín de claveles secos.

 

Me quedé sin ningún sueño…

sin algún motivo…

sin misión.

Me quedé vacío…

mirando al infinito…hueco…interminable,

sin una sola perspectiva,

me he quedado desierto.

 

Me quedé aullándole a la luna…

apagando las estrellas de nuestro idilio,

engañándole al sol… que es probable que vuelvas…

mañana muy temprano…al amanecer…con el rocío.

 

Me he quedado…

con un millar de besos deliciosos…suspendidos,

con caricias petrificadas… cargadas de deseos,

con miradas apasionadas…que calladamente agonizan de impotencia.

 

Me quedé escudriñando algún recuerdo…

contemplando tu retrato….

en el universo de mis miedos,

implorando algún milagro,

procurando sobrevivirle al desconsuelo.

 

Me he quedado solo…

indescriptiblemente solo.