Rosalia sol

 

 

Fuiste tú….

Quien llenó mis días de calor y sol

Fuiste tú…

Guardian de mi corazón

que arrancaste la tristeza de mis días sin sabor.

 

Imaginé maravillas cuando te vi marchar…

Te seguí con mis ojos

hasta que la distancia devoró tu espalda,

llevándose los últimos vestigios de este amor.

 

El alba trajo nuevos renaceres,

ilusiones transformadas.

Hundí la mirada

en el mar agitado de mis ansias

y un tenue resplandor,

acarició mi rostro.

Deshice… poco a poco

tu ausencia en pétalos de algarabía.

 

Fuiste tú…

quien levantó mis alas y me hizo volar…

Fuiste tú…

ángel de mi alma, quien alzo vuelo

y yo aquí…

¡Esperándote!