Al Duborg

El quejumbroso de “Dios”…

No tengo lo que no es mío

ni teniéndolo tampoco,

¡quién le mete el agua al coco

no le pone la del río…!

Lo pollos ni dicen pío

si la gallina les pica,

al gusano que critica

el sabor de la lombriz…

¡Cuando la carga es maíz 

el buche lo certifica…!

 

No entiendo porque razón

la mayoría se queja

si el trabajo de la abeja

lo forja a puro pulmón,

poniéndole el corazón

a favor de la colmena.

¿Compadre no le da pena

de quejarse ante su “Dios”?

si el compromiso es de vos

y quejarse lo envenena.

 

Busquémosle solución

a este bendito problema,

tiene que botar la flema

tome guarapo é limón.

Deje de ser un gruñón,

pare de quejarse tanto

y récele al otro “Santo”

que parece comprensivo.

Cambie de surco el cultivo

y no coseche su llanto.