Te esperaba en noches de tristeza,
para que me amaras. tú , como te
burlaste, y quería que llegaras a
darme tú amor; me quedaba
dormido, apenado. Hoy que vivo
solo y felíz, quieres regresar a mi
lado, después que con quien estabas,
te abandonó, y te hecho a la calle.
Yo nunca te hice esa maldad, tú
te fuiste, dejándome triste y apenado.
Lo pude superar gracias a mi Dios,
que nunca me abandonó, siempre
me dá sus bendiciones, y el pan
a diario.
Soy felíz, y de ti, mejor
quédate alla donde estás , tú amor
no lo quiero, porque harás sufrir
mi corazón como en el ayer.