NASIRA

BICENTENARIO. ANTONIA SANTOS

 

Tu destino te forjo en ambientes hostiles,

 

De inconformismo y rebeldía,

 

Hasta el final de tus días,

 

 Fuiste fiel a tus principios, y a tu sed de justicia.

 

Una mujer que sin dudarlo dio su vida,

 

 Por un pueblo, y por una patria.

 

Por una patria Que de apoco entre ríos de sangre,

 

 Dolor y muerte,

 

Era sometida y arrastrada a ser simplemente,

 

 Una sombra y una esclava.

 

Pero tú con los tuyos y tu espíritu inapacible,

 

 dieron su vida y lograron

 

Liberarla, fue caro el precio, y fue mucha la sangre derramada,

 

Antonia, pudieron callar tu voz,

 

Pudieron parar tus pasos,

 

Y vendarte los ojos para que no presenciaras tu propia muerte.

 

Pero no pudieron contener, la ira de la gente,

 

Que congregada en las campiñas mirando tu suerte,

 

Juraba que acabaría con el ejército realista.

 

Y fue tal su ira que no descansaron hasta cumplir lo

 

Que aquel 28 de julio de 1819 prometió en unísono un pueblo.