ubik

EL PROYECTOR DE ÁZOE

Ángulo muerto,

 

el ángel desierto de la guarda

tampoco puede imaginarme

con su luz heredada

de la piedra original.

 

Ni me cura de la invención de los sueños,

jerárquica vigilia del origen.

 

Subido a la alambrada 

de una televisión encendida,

 

me insta a perseguirlo

entre los límites rupestres

de la palabra invadida

por trampantojos.