TITANIO 333

ENCARNIZÁDAMENTE . . .

 

Encarnizadas, LLameantes y Aguijonadas.

Hay paLabras que bien EntreVeradas.
Tornan en LLamas, Las Marejadas.
Y de un Acento a Otro.
Es imposibLe retomar La vida Diaria.
Porque Incendiaria.
VoLcamos cada Mirada.
Prendiendo así Fuego.
Al Acartonamiento generaLizado.
El del Mundo.
Y el del Espacio Profundo.

PuñaLes.

Encenizados Los Pergaminos, incLuso Los titubeos.

MisiLes.

Exterminada La Burocracia.
Aún más Los Verbos.

Sí.
La escritura Consume Roma y La Depura.
Cuando arden Las PaLabras.
Y despejada La Humareda.
Todo es Magnificencia.

Esència ..    LLanura ExceLsa.

ExceLsa ..    La gravedad de La Tierra.

Agudeza . .
La del Autor desconsoLado.
Quien a La Luz de Las VeLas.
Surcando va La edad Media.
Gracias al fiLo de sus TiniebLas.

Letras.

Entibiadas por el Suspiro.
Se dispersan deshiLando el Vendaje.
Que nos aLeja del ProLífico Misterio.
De Los Negros Agujeros.

Pétreas.

Frías permanecen Las primeras pLanas.
DobLegando a Las Legiones que Secundan el Primor de Las PaLabras.
En especiaL el de aqueLLas beLLacas.
Tan Acorazadas.
Que Precisan de Puños Certeros y pLumas de Titanio y Acero.
Para de un soLo goLpe.
ExtirparLes el Agujero Negro.

Ese Vacío.

La única Vaciedad con Registro en La Historia, como Desead@.

PaLabras,
paLabrejas,
PaLabrotas;

Amo a cuaLquiera que se Trague tanto Príncipes como a Sapos.
La beLLeza, La feaLdad;
Son pura TerminoLogía.
Es a La Pureza del HabLa.
A La PoesíA
A quién hay que rendirLe pLeitesíA
.