Elizabeth Maldonado Manzanero

A mi niña

Duerma mi niña, mientras mamá te acaricia.

Descansa mi vida, con la entrega al propósito

de conocer más allá de los cometas.

Duerme mi ángel sueña que eres sirena

Recorran tus aletas el fondo de ti misma.

O mejor se un ave que vuela al paraíso

a reconocer el rostro amoroso de Dios.

Sueña princesa y que tus sueños sean

tu alimento para adentrarte con energía a la vida.

He guardado para ti varios tesoros

Y quizás tu cuerpo estremecido sepa

que tú eres el mayor bien de mi cofre

que ningún pirata me lograra arrebatar.

Sueña, se lo que quieras, reconoce lo importante que es soñar

y cuando despiertes la vida te saludara simplemente al inhalar.