Ana Estraviz

Ecos en el Silencio

 

Alas frías, polvorientas,

sobre un barco sin rumbo

 

Obra teatral no representada,

pues no queda ya nadie para subir las escaleras

 

Mira sin ojos las hiedras que crecen en el resto

Sabe que es el destino que le espera a ella

 

O quizá no, quizá no lo sabe

no sabe nada, es solo piedra

 

Pero antaño no lo era

Fue el símbolo de una batalla, y más tarde el de una Era

 

Pero los símbolos mueren

cuando muere quien los interpreta

 

El Arte muere también, Maese,

al morir quien lo contempla

 

Ojalá la luz de la Luna ilumine aún

en la madrugada

a la algún día inmortal brisa marina

cubierta ahora en frías telarañas...