Todo se tiñe de oscuro,
todo ruido callado, solo un susurro sublime
y la noche se ha deslizado.
Entra la noche por ventanas y puertas,
por folios de blanco vaciado,
apenas se alumbra tu silueta,
apenas dibujan tus manos,
pero con tinte oscuro ha pintado,
tu mirar fieramente expresado.
Como se desliza esa noche,
eternamente esperada,
como confunde las sombras
con la oscuridad mezclada,
infiltrando todas las partes
incluso tu sueño soñado,
esa noche amada,
ese noctuno mirado...
La noche espera su turno,
con tu corazón embrujado,
que acabe ese día deslumbrante,
que ese día quede enterrado.
La noche llega de nuevo,
con su color apagado,
con esa paz que yo espero,
en su regazo plegado,
en su silencio buscado
lleno de figuras,
de un bello perfil esbozado.
La noche tiene su forma,
su explendor desbordado,
su color y su sombra,
y su sosiego adorado.
Esa noche deseada
esperada, engalanada,
de estrellas iluminadas,
esa noche encontrada esa noche atemperada...
Noche, noche,
mientras permanezcas y perdures,
yo quiero que eternamente dures,
y no, no en esta noche,
no quiero de nadie un reproche.
A. Vida. Primavera 2021.