Esteban Mario Couceyro

La mano izquierda

Él estaba sentado en ese oscuro bar

recordando el olvido

añorando eso que dejó en el pasado

No quería tomar más

dejar así, sin más, la realidad

pero esa mano aferrada al vaso

lleva el licor como una daga

enterrándola una vez más

en su garganta

El cantinero, sin ganas

rellena el vaso otra vez.

La mano derecha sobre la frente

oculta que llora amargo

las oleadas de recuerdos

los besos dados

sin saber a quién

culpa de esa mano izquierda

la del vaso como puñal.