Bajo el arrullo del ventilador
duermo
bostezo
sueño.
Me despierto con la vista fija en el mar
viendo pasar los buques del mundo.
¿ Ese donde irá?
Apenas andan de aquí para allá,
como yo hasta que termina el crepúsculo inexorable.
Entonces me refugio entre mis entrañas al amparo de la tierra fría y del aleteo molesto de las estrellas ante mis ojos.
Y sueño despierto lo que no sueña nadie
Yo que dejé que me venciera el sueño y los recuerdos devastados.
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