LS9

¿Dónde estás, Cerro Pelado, después de 55 años?

Despidieron las aguas de nuestro mar
el viaje de aquel insolente barco
que escondió tras su Pelado marco
a esos asesinos del azar.

Subieron todos centrados en llegar
pues sabían que si cruzaban el arco
y plantaban su bandera en el palco,
nadie la podría tumbar.

Intentaron detenerlos con todo,
les apuntaron los cañones del odio
y hasta enviaron algunos aviones.

Pero esos planes nadaron en lodo:
mucho antes de llegar al podio
los cubanos ya eran campeones.