Eduh Siqueiros

El roce de tu piel con mi piel

Numerosas galaxias armonizan desde tus pupilas cálidas el brillo de tu mirada cósmica, mientras te pintas los labios de estelar carmesí.
En las ondas de tus cabellos orbitan cuerpos planetarios constituidos con tu aroma de mujer, quedo incitado en tu espacio sideral y respiro los asteroides de pasión que se azuzan en torno a ti.
La fuerza gravitacional de tu integridad me atrae y propiciamos el roce de tu piel con mi piel -en una aproximación enérgica-, que eriza tu atmósfera y estimula el erguimiento de volcanes en todo mi organismo.
Tras el contacto de nuestros labios se activan los terremotos en la corteza de nuestro atavío dérmico y se sacuden las entrañas de nuestra efervescencia.
Te sujeto, y mi potencia sidérea se implanta en el confort de tu intimidad y me desintegro en tu cálido interior.
Soy dentro de ti uno solo -integración de mi ser con tu ser-, en la conmoción de este galáctico arrobamiento. Y soy tuyo y eres mía por la mutua entrega en nuestro abrasador universo.