guisseppe guevara

ternura.

La música llega tardía

y se troca en llanto,

en el rincón más oscuro de mi casa.

Estos ocasos sublimes

me agobian de ternura

y asfixian lo poco que queda de mí.

Esta suerte

de niño abandonado espera

tu sonrisa amorosa.

La rebeldía

del cielo es aplastante

y ya no hay donde mirar.