Gustavo Samudio

Quien dijo que la depresiĆ³n no mata ?

Daria todo por volver a esas tarde con papá, volverlo a abrasar y abrasarlo tan fuerte que no quererlo soltar. Hoy solo me queda el recuerdo de lo ultimo que le dije, eso me tortura hasta ahora y para toda la vida, como podre olvidarme de esa frase \"Púdrete viejo\", algo dentro mío se va desvaneciendo lentamente como una estrella fugas y va dejando  ríos de melancolía.

Su ultimo cumpleaños ni siquiera aparecí en su casa para saludarlo, creo que esa fue la gota que derramo el vaso y que su cuerpo ya no aguantara tanta tristeza y terminara en un hospital. Cuando fui al Hospital y lo vi tirado en la cama sin poder aguantar su propio cuerpo, note que el no me quería ahí, no quería que lo vea en ese estado, una palabra entrecortada que no pude distinguir  fue acompañada con una lágrima suya, en ese momento sentía como si alguien estrujara mi corazón con todas su fuerza.

Luego de dos días en un cuarto de hospital papá entro en terapia intensiva durante dos semanas sin poder hablar, reír o simplemente agarrar mi mano, prácticamente vivía en el hospital yendo a visitarlo en solo un horario que los doctores permitían y cada día era lo mismo, las mismas palabras de los médicos:

\"Sigue con drogas inotrópicas sin mostrar ninguna mejora\"

Fue tan doloroso escuchar eso cada día, porque cada día iba con la ilusión de pensar que ya estaba mejor. Antes de que falleciera, le había preguntado a la doctora:

\"¿por que mi padre está en ese estado?\",

ella tratando de explicar con claridad, suspiro y me dijo:

\"Además de que le faltaran un gran porcentaje de glóbulos rojo, él sufría de depresión\".  

Me quede con la última palabra Depresión retumbando en mi pensamiento, no podía creer, y yo que le culpaba por falta de cariño hacia mí. Esa noche derrame lagrimas descontroladamente y pensamientos que me culpaban de todo, como podía saber con clarividencia de que él sufría de depresión, si nunca mostró ningún gesto que pudiera demostrar que él sufría por dentro, pensé que su alejamiento era por ser tan huraño y no por que una enfermedad lo estaba devorando sin dejar rastros...