Noel Varela

Llega y me viene, a veces, sutilmente, fuertemente.

Llega y me viene, a veces, sutilmente, fuertemente

la necesidad de esperarte cada día

excepto en viernes,

excepto cuando más me tiente.

 

Llega y me viene, a veces, sutilmente, fuertemente,

las ganas de querer quererte

cuando menos te soportes,

cuando menos te acerques.

 

Llega y me viene, a veces, sutilmente, fuertemente

la idea de retratarte siempre,

apreciar lo que de alguna forma me mantiene

y me deja morir como en diciembre.

 

Llega y me viene, a veces, sutilmente, fuertemente,

el sentimiento de remordimiento

cada vez que me miento

gritando al viento que no te fuiste

que no huiste, que aún me quieres.

 

Llega y me viene, a veces, sutilmente, fuertemente,

las ganas de querer olvidarte

dejar de pensarte, dejar de recordarte,

tan imposible, dime como no amarte

aunque cada segundo dueles.