Luis de Yeliang

La había soñado

La había soñado y presta

rehizo una rosa de un halo

de tan colorida mariposa

y sólida como un guijarro

caminó entre los ríos

de mi dolor acumulado

 

La soñaba, tal vez me dijo

entre susurros vehementes delirantes

"no por quererme será mi amante

antes mas bien deberías detenerte

porque un beso mío sería fulminante

pero un beso tuyo para mí sería un vacío"

 

Y necio yo, aún rogaba

cual condenado irreflexivo

lo mucho que la amaba

que sin ella ya no vivo

pero era un sueño y cavilaba

lo crudo del despierto y del dormido

 

No la sigo, la he borrado

eso respiro mientras decido

mas cuando la noche llega

como juez a su destino

la sueño toda, enamorado,

como la novia que jamás me quizo...