Raúl Carreras

El libro

Si se quiere viajar lejos, no hay mejor nave que un libro.
Emily Dickinson

Escalé hasta la cima de sus tapas,
aspiré la fragancia de sus hojas,
abriendo cada página
al tacto de mi mano temblorosa.

Dibujando en mis ojos sus palabras
me introduje en la esencia de su historia
llevando la bitácora
a mares que trazaron otras olas.

Yo era audaz navegante que bogaba
buscando la gran isla misteriosa,
el temible pirata
que cantaba sus gestas desde proa.

El galán caballero que intentaba,
como lo hizo en su tiempo casanova,
seducir a las damas
con sinfín de requiebros y lisonjas.

Era Ulises, héroe en la batalla,
candor del Principito con su rosa,
comedia, tal vez drama,
Hamlet, o los amantes de Verona.

Un crisol de leyendas y de fábulas
al meterme en la piel de mil personas,
un viaje sin mañana,
era un libro grabado en la memoria.