La vejez mengua la parte física pero activa los puros sentimientos,
en esta etapa eres más sensible, vibra tu interior, eres una esponja,
poco importa esa motricidad, tu interior capta los procedimientos,
es posible que tengas varias prohibiciones incluso degustar toronja.
Posees una óptima libertad: tu autodominio, hablas con sinceridad,
las barreras pierden su función, eres tu único dueño, más auténtico,
adquieres suficientes elementos, en lo mínimo te afecta la oscuridad,
incluso descuidas tu presentación personal, al diablo todo lo estético.
Gloria al creador si pasas de los sesenta con tus facultades mentales,
los licores añejos son mejores, eso dicen, el tiempo te ha cualificado,
algunos habrán sufrido varias pérdidas, incluidas sus piezas dentales,
habrá que lamentar cuando los extraños sucesos te han desubicado.
Atormenta la ausencia de esos seres queridos, se arruga el corazón,
cada pena es un crisol que purifica el alma e incrementa la fortaleza,
el cuerpo es una máquina perfecta y adquiere un inmune caparazón,
es precioso saber que somos parte esencial de la hermosa naturaleza.
Jaime Muñoz, abril 16 de 2021