Al Duborg

Mi gente pobre buena…

Por mi gente pobre buena

quiero escribir esta carta,

estando nuestra tierra harta

y al rico no le da pena.

Tiene en perpetua condena

a los pobres como esclavos,

con irrisorios centavos

para lograr su sustento.

El rico duerme contento

y el pobre en cama de clavos.

 

Por mi gente pobre buena

vaya este fuerte jalón.

Si el azote del patrón

les aumenta la faena,

viendo en la riqueza ajena

el esfuerzo de sus años

y hacer creer con engaños

que serán más sus mesadas.

En las arcas malversadas

jamás entran los extraños.

 

Por mi gente pobre buena

tienen derecho a vivir

de su trabajo exigir

al menos justa quincena.

Tener hijos por docena,

es como comer cartón

y morir con la ilusión

de salir da la pobreza,

sabiendo que la riqueza

envilece el corazón.

 

Por mi gente pobre buena

tus hijos son los soldados,

de tus patrones malcriados,

racimos de la veintena.

Obreros de una colmena

para la guerra inminente,

entran con el sol naciente

escarbando las botijas.

Jugándose en las ouijas 

sus vidas en sol poniente.

 

Por mi gente pobre buena

si llegan a ser patrones,

no repitan las canciones

cuando llegue su verbena.

Recortando la melena

al largo resentimiento,

cantando en todo momento

canciones de humanidad,

repertorios de humildad

en su tranquilo aposento.