Un bardo me contó que poesía
es solo la erupción del pensamiento;
que esparce su fulgor con suave viento,
que lleva del amor su melodía.
Me dijo que su lava procedía
del mar de la ilusión, que es alimento
que dulce, al corazón le da sustento,
llenándolo de luz y de alegría.
Que el verso es un suspiro que florece
en medio de magníficos rosales;
que es sueño voluptuoso que se mece
al son de bellos trinos de zorzales,
que tienen esa nota que estremece,
del alma, los mas nobles ideales.
Autor: Aníbal Rodríguez.