Alfredo Daniel Lopez

Gangsta Rap

 

 

Gangsta Rap

 

A los que sufren sordera
se sabe que los implantes
su vida cambian de un antes
a un después...¡quién lo creyera!

 

Una niña que esperó
por su implante cuatro años,
al oír curó los daños
que el silencio le causó.

 

Parece algo muy sencillo
escribir de la sordera
pero quién no lo quisiera:
escuchar cantar a un grillo,

 

oír el agua de río,
el tintineo de lluvia,
ese invierno en que diluvia
o del pollo el pío pío.

 

Existen operaciones
esas del oído interno,
que colocan un injerto
y capta las vibraciones,

 

vibraciones o emociones
que abren un nuevo universo.
Ahora utilizan el verso
a manera de canciones.

 

Lo bautizan como rap,
como peleas de gallos,
riman sin que existan fallos,
sin poner nunca los flaps.

 

Si eres sordo rapear
se vuelve un sueño imposible
y solo será factible
por tu deseo de hablar.

 

Aquella niña en el mundo
hoy se encuentra rapeando,
rima a rima fue creando
un estilo de inframundo

 

dónde solo ella es la reina.
Se transformó de la nada
en esa niña mimada
del porro y de la heroína.

 

Quizás la sordera era
menos tóxica que el gangsta,
que día a día cizalla
tu alma mi \"niña dulcera\".

 

Como añoro hoy a la niña
que me leía los labios,
sencilla como los sabios,
Verde como la campiña.

 

Han pasado veinte años
y mi niña ya es mujer,
la fama costó su ser,
ahora vive desengaños.

 

Rodeada de mil parias
viaje por el mundo entero,
ella es solo un huevo huero
de emociones lapidarias.

 

La ciencia salvo su oído,
el mundo quema su alma,
¿cuándo encontrará la calma?
¡yo sí escucho su gemido!

 

En el fondo ella se añora,
se siente oveja perdida,
volver no sabe a su vida
y en su camerino llora.

 

No es solo oro lo que brilla,
brilla nuestro corazón
cuando ríe a la sazón
de una vida que es sencilla.

 

 

Alfredo Daniel Lopez
28 - 02 - 2021
Barcelona España