Mataron cuatro siglos atrás en España, norteña Navarra,
De Zugarramurdi la hoguera en cruel Juicio a brujas mujeres
Que con Dios falleciente , la maldad escapa de la moharra,
\"Beatífica\" impiedad de togados con los más sórdidos placeres.
Si las crisis diversas campean, cuando extremas son las pobrezas
El príncipe Lucifer de la Luz muta en cornúpeta macho cabrío
Y en los nocturnos cálidos aquelarres, bambolean calvas cabezas
Desde los secretos hechizos tan sigilosos a la vera de algún río.
La cocción del hediondo sapo verde en el ferroso caldero ritual
Necrofilias y antropofagias son serial del menú de los maleficios
Que el siniestro Pacto con el Diablo laudará su muy clara señal:
tránsito de favores al vil Poder, razón de medrosos beneficios.
Los cólicos por Tsarauz también anduvieron sin marcha atrás
Renacer de creencias, adoratrices orígenes muy pre cristianos
Reasumiendo orgiástico clima en el tan agitado paisaje montaraz
Éxtasis adictivo, colectiva multitud de drogados, devotos villanos.
Los ecos campanarios de la Inquisición anuncian nuevo amanecer
Hora y punto final apaga la lunar claridad del diabólico banquete
Satanás cambia atuendo bermellón, veloz se retira para luego volver...
Cumplida sin protocolos la gala maléfica, paroxismo del Gran destete.
Cuatrocientos años de los sanguíneos sucesos de semi dramas ocultos
-sublimaron temores cuando a gobernar renunciaron señores muy Principales -
Recursos de Psiquis para acotar graves pesares, todos ellos con tumultos .
Hoy: Dios, Ciencia y Política tampoco renacen, solo recaudan...¡confusos caudales!