Seydel

A mi padre

No  iré al cementerio a llorar sobre tu tumba

no le pondré jazmines a una lápida fría.

De ti guardaré lo bello:

guardaré tus historias de amores imposibles,

los tangos, las tonadas y los puntos guajiros,

guardaré la expresión pícara de tu mirada,

el roce de tus manos cuando me encontraba triste.

Cuando repaso mi día y encuentro algo mal hecho

pienso en lo que tu dirías si estuvieras aqui.

Por eso muchas cosas no iré al cementerio

porque vives en cada cosa que me haga recordarte.