Naira

MEMORIA LIGERA

Una sonrisa formada por algo insignificante

Una mirada por el viento que agitó tus rizos

Un suspiro por tu porte galante

Y las gracias por todos los narcisos

 

Te miré por primera vez en mis sueños

Ignoré que eras mi amor verdadero

Caminaba hacia la ilusión de los cielos

Y en el reflejo de tus ojos admiré el atardecer entero

 

Los árboles sabían que ni una palabra te dirigiría

Y azotaron fuerte sus ramas sacudiendo mi cabello

Bajo el cielo rojo tu mirada se encontró con la mía

Quedé en evidencia, no creí que te fijaras en ello

 

Sentí como por dentro me invadía un invierno

Que incluso los colores se detuvieron;

Y ahora en este momento eterno

Por fin nuestros corazones al compás latieron.